jueves, 21 de febrero de 2013

PROTESTA: Sindicato Automotor del estado Lara,

Nacionales

Conductores de cisternas se quejan ante la Alcaldía

Escrito por Kemberling Rodríguez / Fotos: Elías Rodríguez
 
 
Frente a la Alcaldía de Iribarren, en pleno centro de la ciudad, llegaron molestos los conductores de cisternas pertenecientes al llenadero San Juan. Cerca de 180 hombres resultan afectados con los pagos insuficientes que, al parecer, ofrece el gobierno municipal desde hace varios años.

Desiderio Rodríguez, vocero de los manifestantes, declaró que el aumento para este 2013 fue “pírrico” y en nada se ajusta al alto costo de la vida. De 200 bolívares por viaje al norte de Barquisimeto, pasó a 260 bolívares: “Nos ven la cara de tontos; ese aumento no significa nada”.

Antes de las 9.00 de la mañana, se apostaron en los alrededores de la Plaza Bolívar y los cisternas mantuvieron el tránsito automotor paralizado en la carrera 17, entre calles 25 y 26, así como en el resto de vías cercanas. A pesar que exigieron la presencia de la alcaldesa Amalia Sáez no apareció la burgomaestre.

Rechazan al sindicato
Erick Zuleta, presidente de la Federación Nacional de Transporte y responsable del Sindicato Automotor del estado Lara, estuvo en la protesta de este jueves en la mañana, pero su presencia causó enojo en la autoridad municipal.

“Nos quieren negar el derecho de defender a los agremiados, cuando el Sindicato Automotor incluye a todos los conductores que prestan un servicio, no exclusivamente al transporte público. ¿Entonces tendré que sacar del gremio a los miles de camioneros que están afiliados al sindicato? De ninguna manera”, sostuvo.

Mostró un acta firmada por todos los conductores de cisternas del llenadero San Juan, donde lo autorizan como defensor de sus derechos y, en este sentido, pidió respeto por la organización sindical que representa.

Además reprochó que no sea bien remunerado el trabajo arduo de los hombres que trasladan el vital líquido hasta las comunidades de las parroquias El Cují, Tamaca y Unión (zona norte). “Mientras Hidrolara paga 500 bolívares por cada viaje a las comunidades, la Alcaldía de Iribarren apenas paga 260 bolívares, aunque sigue morosa con los dos primeros meses del año”, dijo Zuleta.

Indicó que varias veces intentaron comunicarse con la autoridad local sólo que no hubo receptividad y, para desdicha de los trabajadores, continúan sin el pago de sus labores.

Temen que el incremento de la Unidad Tributaria termine de hundir la economía familiar porque el costo de los alimentos también aumenta y cada vez resulta más difícil cumplir con el sustento del hogar. “El precio de los productos sube, la canasta alimentaria está por las nubes y los humildes conductores de cisternas no tienen cómo salir a flote”.

Comunidades desasistidas
Por otro lado, estuvo la realidad que enfrentaron las familias del norte de la ciudad, sin el suministro de agua durante este jueves en la mañana. Los vecinos debieron esperar hasta hoy para almacenar el vital líquido en las “pipas” y demás recipientes.

El Cují, Las Veritas, El Jayo, Las Nieves, Las Casitas, Francisco de Miranda, Rastrojitos, Andrés Bello, Sabana Grande, entre otras comunidades, resultaron afectadas por la falta de agua.

Fotos: Elías Rodríguez